Bienvenidos
y adiós, así, a la cara, sin jaboneo. ¿Por qué preguntaras? Pues porque hoy el
Luckyzine cumple diez años, diez tacos, diez primaveras y como campeón mundial
de los blogs, he decidido este marco para darle fin, KAPUT; sí, alguna vez
hemos chapado, pero… ¡esta es la definitiva! (y no lo hacemos para llamar la
atención, y pidáis que cambie de parecer, ¡No! Ni quiero que lo hagáis, ni
vosotros queréis hacerlo). Aquello de matar el blog al cabo de un año estuvo
bien, irse en lo más alto, pero ahora, con seiscientos artículos a nuestras
espaldas (que se dice pronto) las razones son bien distintas y hasta mejores.
No
se trata de agotamiento, sino de hartazgo, no por mi parte, sino por la de los
lectores, que por evolución prefieren otras vías de consumir humor; y conste
que el Luckyzine nunca ha tenido por objetivo complacer a seguidores, pero
evidentemente, si a pocos les interesa…para eso están diez años de artículos,
para ser releídos cuando queráis (unos han envejecido mejor que otros…por no
decir que alguno da vergüenza ajena).
"¡¡¡Contratada!!! Empieza mañana" |
Ahora
habrá quien señale con el dedo y se alegre de la caída, más, nuestros rivales
(aquellos que tenían ideas por contagio), que los hubo, fueron barridos en su
día, nos hemos meado en su cadáver por muchos años, demostrando que nosotros no
estábamos aquí para recibir comentarios complacientes de sus amistades o
parecer ingeniosos bajo la nostalgia nocillera. ¡Somos los putos triunfadores!
y si nos pasamos a los videoblogs, al twitter o a la plataforma de moda en
cualquier momento futuro seguiremos teniendo y siendo lo que ellos no son ni
fueron.
"Mientras tanto en México" |
¿Por qué no decirlo a las claras? ¿Acaso es mejor
dejar de publicar y callar como una meretriz? ¿Sabes cuántos miles de blogs son
abandonados al cabo del año en gasolineras? Lo que en un principio era una
mascota que fue regalada en navidades ha crecido y ahora estorba, el Luckyzine
nunca fue así, nunca fue una obligación, ni tuvo mayor intención que la de
divertir escribiéndolo y desear que leerlo lo fuera para ti. Ahora nos llega el
último informe de la agencia “Endoscopia” señalando un descenso de interés por
parte del público en el Luckyzine, pues no pasa nada, cada uno a su casa y a
seguir siendo amigos…Además, yo ya me pasé la última pantalla de internet ¡con
una moneda! El monstruo final, es fácil de bajar.
Bueno, os preguntareis, ¿Y por qué ahora? ¿Cómo has
tomado la decisión? Pues mirad, estaba yo actuando en un club del Lower East
Side de mi ciudad en riguroso
playback, cuando miré directamente a los ojos de una mujer de buen ver (y mejor
palpar) y lo tuve claro, esto había dado todo lo que podía dar, me sentí como
un auricular de esos que dejan de funcionar por un lado, como unos playeros
Pump-Up con cámara de aire, como Windows Vista en vinilo…En definitiva, la
sensación de fin de ciclo era completa y total.
"A la izquierda,Trevor Horn, viejo amigo del Luckyzine...dadle cinco pavos para chili con carne" |
Estoy henchido de orgullo, por haber cubierto grandes
momentos de la humanidad, tales como cuando el
papa logró su primer homerun para los Yankees de Nueva York,
el regreso de Miguel Indurain al volleyball femenino, la SGAE solicitando que
paguen un canon por clonar a la oveja Dolly, la operación “Seborrea duradera”,
cuando The Clash le robaron el título de “Sandinista” al disco que Juan Pardo
iba inmediatamente a publicar, o cuando se reveló que Hugh Jackman
interpretaría a Winnie de Pooh en la nueva versión hollywoodense con personajes
reales.
Hemos sobrevivido al Apocalipsis del final del
calendario maya y al radioactivo de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, nos
han implantado el chip “Obama”, nos ha caído una y otra vez sobre la cabeza el
puto meteorito ese que cada año va a fulminar la humanidad…a los Nash
(-¿Quiénes?- Dice un lector sorbiendo fanta-piña), a las Chicas Gilimore (-¿Las
cualas?- dice una lectora ), a la moda Matrix (-¿Ein?- Dice el honrado
político) y ¡sí! También a las demandas de famosos ofendidos por algún comentario
vertido en el Luckyzine…
Dicho
esto, ¿Qué más se puede decir? Pues lo bueno, claro que sí, porque con lo que
nos quedamos es con la risa ¡Lo puto más importante! Y no os preocupéis,
caeremos de pie, yo sin ir más lejos ya estoy contratado para retransmitir los
campeonatos de punto de cruz 2018 (gracias a que el año pasado lo hice bien en
el torneo interreligioso comentando el encuentro mormones Vs protestantes). Al fin y al cabo, hay que ser positivo, hay que
sacarle el lado bueno hasta a reencarnarse en un clic de Famovil (fíjate sinó
en Eduardo Noriega) o montarte un grupo de música y que formes por error
Safriduo (¿qué quieres? Soy un esclavo del ritmo).
Al
fin y al cabo, en diez años hemos dejado claro una cosa, que somos un desecho
de virtudes.
¡Muerte a la nostalgia!
Adiós,
muchas gracias, nos vemos en la otra cara del disco.
Lucky
Lee Perkins
20
de diciembre del 2015
"Un retrete con vistas" |