miércoles, 15 de febrero de 2012

48 HORAS TROGLODITAS


Bueno, hoy aparco la línea de humor que sigue el foro para insertar una hoja de diario, puede que a la mayoría de vosotros no le importe una mierda el asunto, pero, como esta es mi casa, si no les gusta saben dónde está la puerta.
Pues quien me lo iba a decir cuando era un infante, que algún día podría llamar amigos a los miembros de una de las bandas que más he visto en directo, “Los Trogloditas”. Una de las bandas que han escrito con letra de oro la historia del rock patrio, durante años acompañaron a Loquillo y se dieron las inevitables entradas y salidas de miembros, excesos, defunciones, cabreos y locuras han forjado su leyenda…Y tras que Loquillo decidiera desvincularse de ellos definitivamente, la banda cayó en el sueño de los justos y para muchos en el olvido.

Hace unos meses, Simón Ramírez, el ultimo Troglodita y único miembro original que seguía desde el primer día se junto con Jordi Vila (Otro de los Troglos originales) para participar en el homenaje “Ráscale Guille”(En memoria del difunto Troglodita Guillermo Martín). Ante la necesidad de contar con un guitarrista y la imposibilidad de que Xavi Taker les ayudase como en un principio se había deseado, Vila llamo a un amigo suyo llamado Diego García. Y aunque solo interpretasen dos temas en aquel concierto, la respuesta del público provocó que Simón y Jordi pusiesen las cartas sobre la mesa, los Trogloditas volvían.
Y aquí es donde un servidor les deja con una entrada de su diario.

Me encontraba en la estación de autobuses de Oviedo, era la una y media de la madrugada del martes al miércoles ocho de febrero del 2012 y tenía por delante unas seis horas de viaje hasta Madrid, con mi bajo Eastwood como equipaje.
Una vez llegué a la estación Sur de la capital, tomé el metro para alojarme en casa de Vila y tras descansar unas horas, me veía siguiendo a este puro nervio de ser humano por callejuelas totalmente desconocidas para mi, hasta que llegamos a un edificio habilitado para albergar salas de ensayo.
Abrimos la puerta del habitáculo reservado y allí estaban los Trogloditas, semanas atrás había conocido a Tony Retamosa, pero ahora llegaba el turno de ser presentado a Diego García y a Andreu “Lobo” Muntaner.
Simón, el único Troglodita que no vive Madrid, no estaba, puesto que por algunas cuestiones había tenido que retrasar su viaje a Madrid con la intención de dar los últimos retoques al repertorio antes de la inminente gira que comenzaba en poco más de una semana. Como Jordi sabía que yo me conocía el repertorio al dedillo habíamos acordado que bajase a ayudar, aunque poca falta hacía como descubriría después. Además, Simón pronto nos comunicó que al día siguiente ya se reuniría con nosotros, por lo que mi labor de ayudante solo duraría veinticuatro horas (El resto sería un privilegiado de poder escuchar a que sonaban estos Trogloditas antes que nadie). 
 
No perdimos mucho tiempo en dar comienzo al ensayo, lo primero que llama la atención, por supuesto es la nueva voz, y aunque yo ya había escuchado trabajos de Lobo  con King Wolf, no es lo mismo tener en frente a este showman, verlo moverse y sobre todo oírle modular en unos temas, que casi siempre habían sido interpretados con un registro vocal muy limitado.
Otro aspecto que me golpeó rápido en los primeros temas, es que aquello sonaba compactado, un sonido que se había ido diluyendo con los años, por supuesto no era el mismo de antaño, cosa que también seria ridícula puesto que no están en la formación todos los que estuvieron, y los que sí, han madurado tanto personal, como musicalmente, pero si es cierto, que lo que estaba sonando conservaba el ADN original de los Trogloditas.

Me resulto chocante ver que Diego asumía la dirección del ensayo, ¿No sería lo lógico que la vieja guardia ejerciese ese rol? cualquier opinión pesaba tanto como cualquier otra, pero Diego traía los deberes hechos de casa y se sabía a la perfección no solo los temas sino los nuevos arreglos, encargándose de recordar y advertir  el número de repeticiones de cada estribillo, los puentes entre secciones y los cierres de los temas.
Fue todo un halago por su parte que a la tercera canción me dijese que estaba alucinando de lo bien que llevaba aprendida mi parte, me percate entonces que  Tony era de naturaleza  mas callada, se toma el asunto en serio, si bien no es tan técnico en la ejecución como Diego, si es preciso, no comete fallos y su carácter puramente rockero le va al dedo con la actitud más clásica de la banda. Siendo plenamente sincero, los Trogloditas han tenido guitarristas que han marcado una impronta en su sonido, Ricard Puigdomènech, Xavi Taker, Guille Martín…siempre había un guitarrista que aportase personalidad al sonido, salía uno y otro tomaba el relevo, pero ahora los dos guitarristas son nuevos y eso pone mucho peso sobre sus hombros.
 
Y mientras todo esto se desarrollaba, mi mirada se cruzaba ocasionalmente con la de Jordi Vila, sonriendo cómplice sobre lo que se desarrollaba ante mí, conociéndole en estos últimos años he comprendido que para él no hay otra vida que ésta que estábamos haciendo hoy, levantarse e ir a tocar todo el día, en el local o en un escenario…demasiado indisciplinado para todo, incluso para practicar con la batería, pero, luego es un privilegiado natural, tiene ese “duende”, ese talento natural que le hace sobresalir entre tantos otro baterías…junto a Simón habían encontrado a la gente adecuada para reflotar dignamente a los Trogloditas.
Al día siguiente el ensayo se realizó en el estudio de grabación de Lobo, Simón llegó puntual tras un viaje de siete horas y más de seiscientos Kilómetros, tan campechano como siempre se mostraba ansioso por averiguar si el publico les seguía esperando.  Una vez comenzó el ensayo con la formación completa ya pude hacerme una idea real de cómo van a sonar."

Sé que a estas alturas del texto estáis deseando que os revele el repertorio, pero me he comprometido a no hacerlo, no quiero estropear la sorpresa a aquellos que van a acudir a la gira y especialmente a la primera gala.  Tan solo puedo comentar que sonarán los temas que los buenos seguidores quieren oír, se tocaran versiones y se recuperaran temas poco tocados. Si llegaste a la banda por los hits radiados hasta la nausea te gustaran, si te gustaban los Trogloditas por los temas rockeros te gustaran y si eres un seguidor que te conoces todos los temas hasta el tuétano ¡no tienes disculpa para no ir!

Algunos dicen que vuelven por la pasta...¿Eso es un argumento en su contra? Yo entiendo que cobren, están trabajando y todos necesitamos comer ¡Ojala que la ganen y mucho! Yo pagare religiosamente las entradas de todos los conciertos a los que me pueda acercar, porque a mí me da igual si vuelven por la pasta, por el placer de tocar o porque si no lo hacen  “El hombre del saco” va a matar a un adorable gatito…¿Qué me importa si el que realmente se beneficia soy yo por poder verles en directo con actitud de banda? De banda ¿Oíste?¡Como una banda! Como era hace muuuuuchos años.¡ Pura potencia y actitud!

1 comentario:

  1. poco has contado...y no me refiero a repertorio, que prefiero no saberlo, instrumentos...amplis...cantante...no sé.
    aunque tal vez sea mejor asi.
    m

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