jueves, 7 de junio de 2012

CHAPA CUMEN



Escuchando a Sergio Makaroff con su famoso tema “La bicicleta” recordé que nada tiene que ver, pero ya ves…a aquellos días de infancia en que hacíamos manualidades con la sierra de pelo trabajando un extraño material conocido como “madera”…en si una madera concreta conocida como “chapa cumen” (¿Quién coño fue Cumen?).

Desde entonces he descubierto en mi gran afición por los elementos cortantes, por todos sabido mi especial cariño hacia los serruchos, ya sea bastidor, serrucho de aguja o de costilla, oxidado, reluciente o ensangrentado tras amputación…pero no, acordémonos de aquellos patéticos momentos de la marquetería escolar donde el olor a madera quemada a base de pelo producía cajitas y casas de madera que nunca se parecían a los modelos que venían en los planos…algo así como lo que esperas al ver la introducción de una serie de Jose Luis Moreno, con ritmos de rap o rock chafarderos…y dentro si, te encuentras con algo cutre, pero no moderno, sino rancio como un…como un…¡esto es la pescadilla que se muerde la cola!, ahora me ha venido a la mente el jodido ese anuncio del abuelo que recuerda como a su vez su abuelo le daba un “juester orejonal” (Nueva táctica del Luckyzine para que no nos demanden más) porque él era un niño muy especial y ahora que ya es abuelo se lo da a su respectivo nieto por que también es un niño muy especial…¿Qué pasa? ¿Quieren decir que mi abuelo Cleofus Lee Perkins no me veía especial por no darme nunca un juester orejonal?

Pues allí nos teníais, entretenidos y medio sordos con el sonidillo del corte de la madera, la verdad es que no guardo recuerdos de aquellos trabajos, en general no guardo muchos recuerdos de mi paso por el colegio, quizá debido a la embolia que me dio al beberme tres mirindas seguidas o por aquello de ponernos una pulsera Rayma para cualquier cosa, ya fuese para los dolores reumáticos, dolores de cabeza o sintonizar TVE 2 en el Moncayo.
"Tres vidas se arruinaron tras esto"
 Así de cosas acontecidas en mi etapa escolar recuerdo bien cuando explicando la victoria de Syd Justice sobre el General  Moustafa, hice una powerbomb y reventé el pantalón del chándal (¡Os lo juro!), formando un siete en la zona furacal del Ohio...¿Cómo salí de tremenda situación? Usando el sigilo y anudando la parte de arriba del chándal como si fuera un pañal...hecho vergonzoso del que nadie se percató y puedo hoy confesar muchos años después.

Todo fuese por la ciencia, porque aquello de ir al colegio era la paradoja cósmica más surrealista a la que me he enfrentado, ya no solo por la diversidad cuántica tomada forma en la cantidad de especímenes que allí nos concentramos, sino por las explicaciones a cuales más rutilantes de lo que iban a ser nuestras vidas en el futuro.
Comprenda el lector, que eran esos años en que el gobierno nos educaba televisivamente con campañas de concienciación sobre no tomar droja y no fumar...recuerdo a un pazguato que llegó a proxeneta, si, si, como lo oyen...aleccionandonos por entonces a unos chavalitos de su misma edad de lo malo que era fumar…a día de hoy, tengo la suerte de no saber más de él, pero la última vez que tuve la mala suerte de cruzármelo era un fumador compulsivo y proxeneta de tercera (¿He dicho ya que era proxeneta?)...es que lo de llamarle chulo me parece una estupidez cuando en realidad el era el chuleao...su mujer era la prostituta, a la que representaba y encima ésta le exigía dinero a él...¡la vida es muy compleja! (Insisto que ésta historia es trágicamente cierta).

Luego llegas al instituto, dentro de poco ya le llamaremos High School debido a la cantidad de chuminadas que celebramos ya por aquí, como Hallowen o el adelanto de las navidades, creo que el gobierno plantea celebrar acción de gracias el próximo año.
"Ahora en Mp3"
En el instituto, pasas a ser uno más entre la masa y claro, esa masa se divide en dos, el burgo y la clase alta, todo distribuido en forma piramidal, teniendo cada uno de estos bandos instaurado un sistema de clases jerarquizada; tienes a la corona, a la alta burguesía, los palmeros de estos y luego, la clase media y por supuesto...el burgo con su baja estofa de fracasados. ¿Y dónde estás tú? Luchando, o siendo un jodido outsider, ¡si lo sabré yo!...y lo que cansa serlo.

A estas alturas de la película aparece un ser que a todos nos ha tocado padecer, es el famoso “amigo fulas” un ser incapaz de convivir con la realidad y crea a su alrededor un mundo irreal con tal de contentar a los que nos toca (Obligadamente) estar a su alrededor. Por desgracia éste ente es incapaz de conocer las limitaciones lógicas de la realidad y la medida. No sufran vergüenza ajena, pero a mí me toco oír como el abuelo de este personaje era marine americano y dueño de la empresa Harley Davidson...¡así nos va!

Tras este periodo donde los valores se pierden y algunos de tus cercanos pasan a mejor vida estudiantil para dedicarse a “otros oficios”(Y no de Escuela de Arte precisamente) puede que tú llegues a ese momento de ir a la Universidad y allí es donde ves la fauna más echada a perder de todas, los valores no existen, la amistad tampoco, eso sí, tendrás que oír la sempiterna frase de un supuesto amigo decir “Los amigos de la Universidad son los que te duran toda la vida” ¿Hay que decir que este tipo salió de mi vida el mismo día que terminamos las clases del último curso? Y no veas lo aliviado que vivo.

¿Cómo fueron mis amigos de la Universidad? Buena gente en general, pero al final los grupúsculos se formaron y los rencores de no dejarse apuntes, haber salido fulano con mengana, envidias de que alguien aprobase por el morro cuando uno se ha dejado los codos durante semanas...o simplemente tener cualidades naturales superiores que a unos les hacen triunfar dejando en ridículo a otros...en definitiva, el rencor y la envidia, valores que en este país tenemos para exportar a “palás”...Ahora nos reunimos puntualmente para organizar alguna comida o cena, ves que esos rencores han quedado olvidados, aplastados por las responsabilidades de cada uno de cuidar bebés, pagar hipotecas o lo que cada uno se ha cargado sobre sus hombros...yo me miro y sigo igual que antes, incluso ¡más guapo! ¿Y por qué negarlo? ¡Más joven! Las cosas como son.

¿Qué les cuente algún momento vergonzoso de mis días universitarios? Bufff, pues recuerdo la primera cena de curso, donde nos metieron un clavel en la cuenta, demasiado cara para la bazofia que nos dieron, así que un compañero tomó la decisión de cobrarse en forma de vino el abusivo precio de la minuta, viéndome sorpresivamente cargado con dos botellas de vino en los bolsillos interiores de mi cazadora y mandándome desfilar hacia la calle, al salir, cuatro compañeros salían en la misma situación que éste, su servidor...y puedo decir que aquel que tuvo la idea se hizo con el botín de diez botellas de vino, que no recuerdo si se las llevo a casa o fueron bebidas por todos esa noche.

Mira, mejor me callo ya, porque esto de desvelar intimidades, aquí como en los programas del corazón, se tira la caña y luego cuando has creado interés...¡que suelten la panoja! Y vas al programa del mejor postor. Aplicáoslo en vuestras vidas lectores, dejad con ganas a los demás, tenéis que ser excesivos ¡Si vais al kiosco llevaros todos los fascículos, si vais al estanco comprad todo el tabaco!, ¡acaparad! La revitalización de la economía nacional es un deber patriótico.
"Cualquier cosa añadida sobra"


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