6/12/06
SEMANA TEMATICA EN LUCKYLEEPERKINS FOTOBLOG:
ANTONIO HIDALGO, ESE GRAN HOMBRE
HOY: VIAJE INTERTEMPORAL (PARTE 3)
El impulso fue tremendo y cuando Antonio Hidalgo salio despedido del túnel espaciotemporal choco con alguien y cayo al suelo, cuando quiso disculparse vio una enorme figura con un extraño gorro en la cabeza, un montón de sombras le rodearon y vio como un montón de sables le amenazaban, oyó como le consideraban un polizón y le incorporaron, pronto pudo ver que viajaba en un buque surcando los océanos, aquellos hombres rudos le maniataron y llevaron hasta el capitán del navío, un hombre con una casaca y un loro en su hombro que se hacia llamar el Pirata Jean LeDuc Courtegant, el mas bravido corsario que había surcado el Atlántico así como el Júcar, Antonio negó ser un polizón y como el no miente nunca ¡nunca! Le explico su teoría de los portales ínterdimensionales y sus saltos en el tiempo en busca de su dimensión y tiempo adecuado, pero las mentes de aquellos ignorantes se negaron a aceptar la realidad y consideraron que aquello eran patrañas de un loco, por lo cual decidieron pasarle por la quilla y que la ley del océano decidiese el destino de nuestro amado Antonio (que en ese momento no podia dejar de pensar en Junior “El rey de los gatos” y sus abominables raps…preguntandose ¿Por qué no saca ya discos?)
Le soltaron sus ataduras y empujaron con un sable en la espalda hasta que tuvo que saltar, mas, aquellos hombres que desconocían el termino higiene (¡vamos!, como tu) no eran conocedores de la atlética condición de Antonio y este tomo impulso, salto, dando un volatin mortal y cayendo encima de uno de aquellos corsarios, arrebatándole el sable y demostrando su valía en la esgrima, aunque el se noto muy oxidado ya que hacia años que no la practicaba cuando fue propuesto para representar a nuestra nación en las olimpiadas pero el tuvo que decidir su destino entre la elite deportiva o la musical y se decanto por esta ultima…fue librándose de sus rivales, que le atacaban en grupo o traicioneramente por detrás e incluso alguno cantando canciones de OBK, fuera como fuera uno a uno iban cayendo heridos (puesto que Antonio es clemente y nunca mata) o arrojados a los mares
En sendos minutos el barco estaba limpio de malandrines, pero…¡oh no! Aun quedaba a bordo Jean LeDuc Courtegant agarrando por la muñeca a una bella prisionera, por lo que Antonio se aferro a una soga de la mas alta vela y se impulso desplazándose cual liana hasta el otro punto del barco donde le esperaba para medirse con el suyo el frió acero toledano del capitán del bajel pirata, este al ver la superioridad técnica de Antonio ante puso su loro y este murió atravesado accidentalmente por la espada de nuestro héroe, el cual, preso de la culpa por acabar con la vida de un ser cayo arrodillado lloroso (puesto que es un macho muy sensible y humano), momento de debilidad que aprovecho Jean LeDuc Courtegant para alzar su espada y dar la estocada final a Hidalgo, pero nuestro héroe reacciona en el ultimo segundo y bloquea el envite, buscando fuerzas de flaqueza comienza a recordar que haría su ídolo Coque Malla en un momento como este, por lo que le agarro por la pata de palo y la levanto tan fuerte que el Corsario cayo de espaldas rompiéndose la crisma, una vez K.O. Antonio y la doncella le pusieron en un bote salvavidas y le soltaron al mar para que las corrientes marinas le alejasen de ellos.
Y allí estaba Antonio, con la camisa desabrochada por completo asiendo firme el timón con la doncella abrazándole por detrás dirigiendo el buque hacia el sol poniente, fue entonces cuando sintió que en su trasero algo duro se incrustaba y provenía de la entrepierna de la doncella, la cara de sorpresa ante la sospecha que surgía en su mente en ese momento fue mayúscula y decidió saltar por la popa justo en el momento en que el vortice espaciotemporal se abría y le llevaba hacia lo desconocido
CONTINUARA…
ANTONIO HIDALGO, ESE GRAN HOMBRE
HOY: VIAJE INTERTEMPORAL (PARTE 3)
El impulso fue tremendo y cuando Antonio Hidalgo salio despedido del túnel espaciotemporal choco con alguien y cayo al suelo, cuando quiso disculparse vio una enorme figura con un extraño gorro en la cabeza, un montón de sombras le rodearon y vio como un montón de sables le amenazaban, oyó como le consideraban un polizón y le incorporaron, pronto pudo ver que viajaba en un buque surcando los océanos, aquellos hombres rudos le maniataron y llevaron hasta el capitán del navío, un hombre con una casaca y un loro en su hombro que se hacia llamar el Pirata Jean LeDuc Courtegant, el mas bravido corsario que había surcado el Atlántico así como el Júcar, Antonio negó ser un polizón y como el no miente nunca ¡nunca! Le explico su teoría de los portales ínterdimensionales y sus saltos en el tiempo en busca de su dimensión y tiempo adecuado, pero las mentes de aquellos ignorantes se negaron a aceptar la realidad y consideraron que aquello eran patrañas de un loco, por lo cual decidieron pasarle por la quilla y que la ley del océano decidiese el destino de nuestro amado Antonio (que en ese momento no podia dejar de pensar en Junior “El rey de los gatos” y sus abominables raps…preguntandose ¿Por qué no saca ya discos?)
Le soltaron sus ataduras y empujaron con un sable en la espalda hasta que tuvo que saltar, mas, aquellos hombres que desconocían el termino higiene (¡vamos!, como tu) no eran conocedores de la atlética condición de Antonio y este tomo impulso, salto, dando un volatin mortal y cayendo encima de uno de aquellos corsarios, arrebatándole el sable y demostrando su valía en la esgrima, aunque el se noto muy oxidado ya que hacia años que no la practicaba cuando fue propuesto para representar a nuestra nación en las olimpiadas pero el tuvo que decidir su destino entre la elite deportiva o la musical y se decanto por esta ultima…fue librándose de sus rivales, que le atacaban en grupo o traicioneramente por detrás e incluso alguno cantando canciones de OBK, fuera como fuera uno a uno iban cayendo heridos (puesto que Antonio es clemente y nunca mata) o arrojados a los mares
En sendos minutos el barco estaba limpio de malandrines, pero…¡oh no! Aun quedaba a bordo Jean LeDuc Courtegant agarrando por la muñeca a una bella prisionera, por lo que Antonio se aferro a una soga de la mas alta vela y se impulso desplazándose cual liana hasta el otro punto del barco donde le esperaba para medirse con el suyo el frió acero toledano del capitán del bajel pirata, este al ver la superioridad técnica de Antonio ante puso su loro y este murió atravesado accidentalmente por la espada de nuestro héroe, el cual, preso de la culpa por acabar con la vida de un ser cayo arrodillado lloroso (puesto que es un macho muy sensible y humano), momento de debilidad que aprovecho Jean LeDuc Courtegant para alzar su espada y dar la estocada final a Hidalgo, pero nuestro héroe reacciona en el ultimo segundo y bloquea el envite, buscando fuerzas de flaqueza comienza a recordar que haría su ídolo Coque Malla en un momento como este, por lo que le agarro por la pata de palo y la levanto tan fuerte que el Corsario cayo de espaldas rompiéndose la crisma, una vez K.O. Antonio y la doncella le pusieron en un bote salvavidas y le soltaron al mar para que las corrientes marinas le alejasen de ellos.
Y allí estaba Antonio, con la camisa desabrochada por completo asiendo firme el timón con la doncella abrazándole por detrás dirigiendo el buque hacia el sol poniente, fue entonces cuando sintió que en su trasero algo duro se incrustaba y provenía de la entrepierna de la doncella, la cara de sorpresa ante la sospecha que surgía en su mente en ese momento fue mayúscula y decidió saltar por la popa justo en el momento en que el vortice espaciotemporal se abría y le llevaba hacia lo desconocido
CONTINUARA…
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