RISAS ENLATADAS

21 Noviembre 2007

Sempiterno motivo de irritación y no genital, por cierto, es el caso de las risas enlatadas, acompañamiento sazonador de telecomedias y programas mierdosos. Recurso irritante al que se acude una y otra vez para advertir de que lo que ha oído segundos atrás es un chiste y ese hombre o mujer, con cara de “No me entra un melón por el culo” repasa mentalmente la chanza una y otra vez, de frente y del revés, buscando la gracia y mucho mas a la razón por la cual la risa oída era incluso histérica, mas, la sucesión en cortos plazos de estos sucesos histriónicos le llevan a pensar que:

A) Se le ha roto el muelle del humor

B) Hay un pabellón psiquiátrico en las cercanías e interfiere en la señal televisiva

C) Los que hacen la serie son subnormales

"Dame mas gasoliiiiiiiiiina...¡puto euribor!"

DIN, DIN, DIN, no, no es día de cobro, es que el espectador ha escogido la opción “C” y ha acertado de pleno, aun recuerdo cuando un servidor fue despedido de cierta productora y su directo Milikinki Zaragoza, dijo que me echaba por que mi trabajo lo podía hacer un mono que cobrase menos.

"Transformers, more than meets the eyeeeeee...joer si, Starscream era homogay y tambien el mejor"

El Luckyzine en su carácter investigador ha sacrificado dos becarios y
un par de doblones del Siglo XVIII en obtener esta información:

El inventor de las risas enlatadas fue Anthony M. Richardson y vive en Leiford, Missouri )por si alguno quiere hacerle una visita y repasarle el hígado), su padre Anthony M. Richardson Senior era un vendedor ambulante de tónicos reconstituyentes, con el paso del tiempo se dio al crecepelo, su hijo todo un innovador, quería romper esquemas y se dio a embotellar tierra de distintos estados, algún consumidor le demando por que se indigesto al beberla (así son las demandas en los USA ¡que dios los bendiga!), arruinado, opto por vender aire embotellado, tras la 2ª Guerra Mundial vio que le negocio estaba en las conservas se decanto por el enlatado, abandonando las botellas (incluidas las de absenta). El negocio iba viento en popa, pero ahí que le aparecieron Jesús Puente y José Luís López Vázquez como matones de la conservera de atún Clavo y le rompieron los dedos en señal de que debería retirarse del mercado pues la competencia no se anda con chiquitas.

"Esto explica mucho, pero aun sigo sin comprender lo de los midiclorianos...¿al final la vieja del Anakin era puta?"

Así que Tonypuchi, que asi permite le llamen los amigos, vendió la
patente a la televisión y asi se ha convertido en el arma de
devastación neuronal actual.
Usándola han tratado sin lograrlo de hacernos creer que gente como Florentino Fernández o Santi Millán tienen puta gracia.

¿Os habéis dado cuenta de que Florentino y Alicia Senovilla programa que les dan, programa que hunden?. Desde aquí quiero pediros un favor, si conocéis a algún realizador que pulse el botón de la risa enlatada ¡córtale los dedos! ¡TODOS! Es mas, brazos, piernas, lengua y nariz, aseguraos de que no pueda pulsar botones

"NNNNFFFFFF me tufa el aleron (momento de risas enlatadas o nos tachan al Luckyzine de humor escatologico y por ahi si que no pasamos, que luego cotizamos menos"